La soga & Nosferatu

Desde el montaje vemos que ayuda mucho el exquisito plano secuencia, que se lleva en el rodaje, si tenemos en cuenta que para la época los rollos solo grababan diez minutos cada uno, haciendo de este un reto para Hitchcock,  el cual de manera audaz en lugar de realizar cortes, los disimula con fundidos negros aprovechando los primero planos en los trajes de estos personajes, para cuando se instalara el nuevo rollo retomara la acción desde allí, generando este gran plano secuencia que evidenciamos en dos partes, en el principio cuando no muestran el interior, solo los créditos y nos adentran  este lugar, donde da inicio a la historia como tal. Con esta ausencia de cortes, el ritmo de la película respecto en montaje se reduce a pegar cada secuencia donde terminaba el rollo, este plano secuencia genera un ritmo de encierro y de captura al llevarlo a hacer un testigo obligado de varios sucesos que se evidencian allí, sin perder detalle alguno de cada personaje cuando está en el cuadro.