NOSFERATU

La historia de Nosferatu (Drácula), fue realmente una adopción de la obra literaria de Bram Stoker, un novelista Irlandés el cual expuso su obra en 1897, la cual fue adoptada y desarrollada por Murnau luego en 1922.

PERSONAJES PRINCIPALES:

Hutter: Como personaje principal, se destaca por su alegría, por su energía y por su carácter laborioso; además de esto, sobresale en el vínculo que tiene con su esposa Ellen, que a pesar de lo lejos que su trabajo lo llevó, se esfuerza por estar en contacto con ella, mediante cartas, pensamientos. En cuanto al conflicto de la historia, Hutter demuestra un poco de inocencia e inconciencia frente al tema y al conde Orlok, (Y su carácter vampírico que lo encierra en una atmosfera particular) además rechaza el libro donde posiblemente encontraría una mayor claridad sobre el tema, pero su desconocimiento lo llevaría a tener que profundizar él mismo sobre el conde, inclusive buscar una solución al conflicto.

Ellen: Una mujer amorosa, alegre y totalmente paciente, la cual es el complemento de este personaje principal (Hutter), ya que aparte de ser su esposa, siempre ha tenido una intuición y una visión de lo que le procede a Hutter, y de acuerdo a estas situaciones es donde se nota el vínculo que los aliena como complementos; un ejemplo sería la escena donde Hutter se encuentra en el castillo del conde Orlok y Ellen por medio de su sueño, siente y expresa ese miedo mediante una acción sonámbula, al cual el doctor sólo habla de una fiebre alta.

Conde Orlok: Es un hombre desesperada-mente solitario, despavorida-mente terrorífico, se muestra cómo mediante el terror, buscar hallar algún tipo de consuelo, lo cual lo lleva a esparcir la peste incontrolable debido a su incertidumbre. Su carácter tanto gótico, sangriento, monstruoso, hacen mostrar su temperamento retraído, reservado, melancólico e intratable; por ende busca por medio del negocio del inmueble, hacer parte de una sociedad a la cual quiere transformar a su medida, su lúgubre naturaleza y su apariencia lo encaja en una persona deshabitada, aislada totalmente. Pero esa ambición se convertirá en un contragolpe como respuesta a su conducta y su intención con la sociedad, la cual lo llevara a la extinción y la agonía de su muerte ya anunciada.